16 de septiembre de 2013

INFECCIONES DEL SISTEMA NERVIOSO

Fuente: (My Image)
El sistema nervioso puede verse afectado por diversos agentes infecciosos que acceden a él a través de garganta, nariz y oídos, sangre, o como consecuencia de traumatismos craneoencefálicos y operaciones quirúrgicas. Los síntomas que produce inicialmente una infección del sistema nervioso son muy variados: dolor de cabeza, vértigo, náuseas, convulsiones o confusión mental. Las secuelas neurológicas y neuropsicológicas pueden ser importantes, si los agentes patógenos logran atravesar las barreras estériles que defienden al cerebro, es decir, la barrera hematoencefálica y la barrera sangre-LCR. Los procesos infecciosos pueden provocar daño cerebral por diversas razones:
a) Interfieren el suministro de sangre produciendo trombosis, hemorragias u obturación completa de los vasos sanguíneos.
b) Pueden afectar a las membranas de las neuronas alterando sus propiedades eléctricas o sus propiedades enzimáticas.
c) Alteran el equilibrio metabólico de la glucosa y el oxígeno de las neuronas, llegando a provocar su destrucción.
d) Provocan frecuentemente edema, que comprime el cerebro dentro de la caja craneal, lo que produce indirectamente un mayor riesgo de disfunción cerebral.
e) Producen pus, como resultado de la infección, lo que perjudica a las neuronas ya que aumenta la presión intracraneal y se altera la estabilidad de los fluidos extracelulares.
La semiología de las infecciones del sistema nervioso es muy variada, ya que pueden ser inicialmente asintomáticas como la toxoplasmosis, de presentación aguda como la meningitis vírica o con una evolución muy lenta como la enfermedad de Creutzfeldt-Jackob. Los factores causantes de infección del sistema nervioso pueden ser: virus, bacterias, hongos, protozoos y parásitos.

15 de septiembre de 2013

INFECCIONES BACTERIANAS


Fuente: (My Image)
Antes de comenzar a describir los diferentes tipos de infecciones bacterianas es importante conocer que como se producen.

Para eso los invitamos a ver este vídeo haciendo link en la imagen.

¿Que son?

Las bacterias son microorganismos unicelulares que presentan un tamaño de algunos micrómetros de largo (entre 0,5 y 5 μm, por lo general) y diversas formas incluyendo esferas, barras y hélices. Las bacterias son procariotas y, por lo tanto, no tienen núcleo ni orgánulos internos. Generalmente poseen una pared celular compuesta de peptidoglucanos. Muchas bacterias disponen de flagelos o de otros sistemas de desplazamiento y son móviles. 
Fuente: (My Image)
Las bacterias patógenas son una de las principales causas de las enfermedades y de la mortalidad humana, causando infecciones tales como el tétanos, la fiebre tifoidea, la difteria, la sífilis, el cólera, intoxicaciones alimentarias, la lepra y la tuberculosis. Hay casos en los que la etiología o causa de una enfermedad conocida se descubre solamente después de muchos años, como fue el caso de la úlcera péptica y Helicobacter pylori. Las enfermedades bacterianas son también importantes en la agricultura y en la ganadería, donde existen multitud de enfermedades como por ejemplo la mancha de la hoja, la plaga de fuego, la enfermedad de Johne, la mastitis, la salmonela y el carbunco. Cada especie de patógeno tiene un espectro característico de interacciones con sus huéspedes humanos. Algunos organismos, tales como Staphylococcus o Streptococcus, pueden causar infecciones de la piel, pulmonía, meningitis e incluso sepsis, una respuesta inflamatoria sistémica que produce shock, vasodilatación masiva y muerte. 
Luego de conocer que son las Bacterias nos concentraremos en informar cómo se dan las infecciones en el sistema nervioso por estas … 

INFECCIONES BACTERIANAS 

Fuente: (My Image)
Las bacterias son microorganismos, generalmente unicelulares, que no contienen clorofila y se duplican por división simple. En el sistema nervioso la vía de infección bacteriana es el torrente sanguíneo. Desde la introducción de los antibióticos la incidencia de las infecciones bacterianas cerebrales ha ido disminuyendo progresivamente. 

Meningitis bacteriana 

Es una infección causada por diversas bacterias como el Streptococus Pneumoniae o la Hemophilus influenzae, que afecta al aracnoides y la piamadre provocando un aumento en el número de leucocitos en el LCR. Se presentan 5 a 10 casos por cada 100.000 habitantes, con una tasa de mortalidad elevada, entre el 10-15%. Produce fiebre, cefalea, convulsiones, fotofobia, movimientos oculares dolorosos, rigidez de nuca, vómitos, dolor de cuello, petequias, estupor y coma. Las secuelas neuropsicológicas pueden oscilar desde la recuperación total hasta la presencia de déficit crónico en atención, memoria, lenguaje o en la actividad perceptivo-motora. 


Absceso cerebral 

Un absceso es una colección de material purulento dentro del cerebro, que sueleestar asociado a edema, constituyendo un proceso necrótico. Cuando los microorganismos se multiplican y destruyen más células cerebrales, el absceso se comporta como una masa que crece y que al extenderse produce aumento en la presión intracraneal. Hay que sospechar de su presencia ante cualquier paciente con clínica sugestiva de proceso expansivo intracerebral y que cuente entre sus antecedentes un proceso séptico local producido por otitis, sinusitis o traumatismo craneal abierto. Los abscesos se inician por la presencia de un pequeño foco de bacterias purulentas que producen necrosis de la región afectada. Puede ser de localización cerebral pero también epidural, subdural o medular, con unas tasas de mortalidad que oscilan entre el 10-40%. El síntoma más habitual es la cefalea de intensidad moderada de localización hemicraneal, aunque también son frecuentes las convulsiones y la alteración en el nivel de conciencia, desde la letargia hasta el coma. 



Lepra 

La lepra es una infección granulomatosa crónica producida por el Mycobacterium leprae que penetra a través de la piel o de las vías aéreas, con especial predilección por las cubiertas mielínicas del sistema nervioso periférico, aunque preserva el sistema nervioso central. 
Algunas modalidades de lepra pueden afectar de manera precoz a los nervios periféricos, causando dolor intenso y atrofia muscular con el consiguiente déficit motor. 

Botulismo 

Fuente: (My Image)
Es una modalidad de toxemia o envenenamiento adquirido por la infección de una neurotoxina que puede estar contenida en conservas y alimentos enlatados. Los síntomas se presentan varios días después de la ingestión, provocando náuseas, vómitos y dolor abdominal seguido de trastornos neurológicos como diplopia, ptosis, visión borrosa y fotofobia, paresia flácida y en ocasiones parálisis bulbar, sin que inicialmente el paciente presente alteración en el nivel de conciencia. Produce un índice de fallecimientos que oscila entre el 20 y el 70% y su recuperación es muy lenta, dejando secuelas neuropsicológicas muy variadas, dependiendo de la gravedad de la afectación neurológica. 



28 de mayo de 2013

LA QUIMICA DEL AMOR

¿Crees que el amor es química real? ¡Sí! La química subyace en cada paso de una relación. Este campo se encuentra en continua investigación. Cuando te enamoras, tu cerebro experimenta ciertos cambios y también se produce la liberación de algunos compuestos químicos. Los investigadores consideran en general tres etapas en el amor: deseo, atracción y apego, cada una de las cuales lleva asociada ciertos procesos químicos.
1) Deseo - Pasos iniciales
El deseo surge a través de una atracción física inicial y flirteo. Esta etapa depende de características tales como simetría de la cara y dimensiones corporales proporcionadas. El flirteo puede incluir miradas a los ojos, roces y reflejos en el lenguaje corporal. Los dos compuestos químicos que surgen en esta etapa son las hormonas sexuales (testosterona y estrógeno) y las feromonas. 
En el mundo animal, las FEROMONAS son "huellas" aromáticas individuales que se encuentran en la orina o en el sudor, que dictan comportamientos sexuales y attración por el sexo opuesto. La existencia de feromonas humanas fue descubierta en 1986 por científicos en el Centro de Sensaciones Químicas en Philadelphia y sus compañeros en Francia. Estos compuestos se encontraron en el sudor humano. 
2) Enamorándose - Atracción 
El amor romántico o apasionado se caracteriza por la euforia cuando las cosas van bien, y bruscos cambios de humor cuando van mal. Al enamorarte puedes tener muchos síntomas: pérdida de apetito, dificultad para conciliar el sueño o para concentrarse, sudor en las manos, mariposas en el estómago... Todo ésto se debe a compuestos químicos llamados monoaminas, que aparecen en el cerebro: 
DOPAMINA: Comúnmente se asocia con el sistema de placer del cerebro, dando lugar a sentimientos de placer y refuerzo que nos motivan a hacer ciertas actividades. Se libera a través de experiencias naturales placenteras, tales como el sexo o la comida. Algunos estudios indican que cuando se inyecta dopamina a roedores hembra en presencia de un roedor macho, la hembra lo escogerá más tarde entre una multitud. 
FENILETILAMINA: Es una anfetamina natural como la conocida droga, y puede causar los mismos efectos estimuladores. Contribuye a esa sensación de "estar en el cielo" que aparece cuando hay atracción, y da la energía necesaria para mantenerse en pie día y noche con un nuevo amor. 
SEROTONINA: controla impulsos, pasiones indomables y comportamiento obsesivo, ayudando a generar una sensación de "tener en control". 
NOREPINEFRINA: otro neurotransmisor que induce euforia en el cerebro, excitando al cuerpo dándole una dosis refuerzo de adrenalina natural. Ésto causa que el corazón lata más fuerte y la presión sanguínea aumente. Por ello parece que se nos sale el corazón o nos sudan las manos cuando vemos a alguien por quién nos sentimos atraídos. 
3) Apego - Mantenerse juntos 
Junto a un compañero con el que llevamos tiempo, sentimos una sensación de calma y estabilidad, una clase de enlace que mantiene a las parejas unidas. Esta clase de amor está dirigida por las siguientes hormonas: 
OXITOCINA: se la conoce en ocasiones como "la sustancia química del abrazo". Esta hormona es mejor conocida por su papel en la inducción del parto estimulando las contracciones. Pero recientemente se ha observado que puede influenciar además en nuestra habilidad para unirnos a otros, dado que ambos géneros liberan esta hormona cuando se tocan y se abrazan, teniendo lugar un aumento máximo del nivel de oxitocina durante el orgasmo. 
VASOPRESINA: también llamada "la sustancia química de la monogamia". Ciertos investigadores han observado que la supresión de vasopresina puede provocar que los machos abandonen su nido de amor y busquen nuevas compañeras. 
ENDORFINAS: son compuestos bioquímicos que potencian nuestro sistema inmunitario, bloquean la lesión de los vasos sanguíneos, tienen propiedades anti-estrés y anti-envejecimiento, alivian el dolor y también ayudan a mejorar la memoria. 
Niveles altos de oxitocina y vasopresina pueden interferir con los caminos de la dopamina y la norepinefrina, lo cual puede explicar por qué con el tiempo la sensación de apego crece mientras que la locura apasionada del amor decae.
Bueno, como puedes ver, en nuestro cuerpo tiene lugar química real cuando estamos enamorados. Ésto no significa que el amor sea sólo química, pero al menos ahora puedes comprender este sentimiento desde otro punto de vista, ¿verdad? 

Tomado de la pagina de Silvia Martínez 

Imagen de mygifbank

15 de mayo de 2013

TESTOSTERONA Y COMPETITIVIDAD

Los científicos han localizado que los niveles de testoterona aumentan considerablemente entre los deportistas antes de una competencia. Estos estudios sugieren que, los niveles altos de testosterona provocan que los deportistas estén más motivados para ganar incrementando el impulso competitivo. Se ha hallado asimismo, que la testoterona también aumenta después de eventos que mejoran el estatus o el prestigio social (ascenso, promoción laboral, logros académicos, económicos, etc…). Hay una evidencia creciente de que el liderazgo tiene raíces biológicas. Igualmente la investigaciones indican que los líderes más capacitados no son los agresivos del grupo, sino los más eficaces en el manejo de las interacciones sociales. Los investigadores señalan que los líderes eficaces disfrutan de una bioquímica idónea de hormonas y química del cerebro que les ayuda a construir coaliciones sociales y a resolver las tensiónes.

12 de mayo de 2013

MEMORIA

Fuente Gettyimage
Nuestra cotidianidad muchas veces se convierte en rutina y lo que realizamos se convierte en costumbre por la necesidad u obligación que nos acarrea en dicha etapa de la vida, como recordar el camino a casa, el número telefónico de la mama, recordar ideas e información que sirven para alguna solución y recordar cosas del pasado; estas y muchos elementos más hacen parte del funcionamiento de la memoria, definida como el proceso cognoscitivo con la capacidad de adquirir y retener información o experiencias; permitiendo recordar vivencias del pasado a través de estímulos internos y externos que van relacionado con la atención y el aprendizaje; su proceso básico es: aprendizaje, codificación, almacenamiento y recuperación . 

  • Aprendizaje: adquirir conocimiento sobre el mundo, a través de la experiencia. La memoria es la retención de dichos conocimientos 
  • Codificación: transformación de estímulos en una representación mental. 
  • Almacenamiento: retener los conocimientos en la memoria para posteriormente utilizarlos. 
  • Recuperación: acceder a la información almacenada en la memoria. 

Los tipos de memoria son: 
Sensorial: registra la información que viene del mundo externo, durante un tiempo corto y es trasmitida a la memoria corto plazo; se divide en : memoria icónica (visual) y memoria ecoica (oído).
Memoria a corto plazo: retiene la interpretación de la imagen de la memoria sensorial. 
Memoria a largo plazo: mantiene una información permanente, la información de mantiene de manera inconsciente y solo se hace consciente cuando se recupera del sistema. 
Los sentidos hacen parte fundamental en este proceso ya que a través de cada uno de ellos se da una función diferente, pero que complementa a la otra para una mayor información e implementación de las actividades a realizar; existen varias clases de memoria y estas son depende a cada sentido ya sea: visual, auditivo, táctil, olfativa y gustativa.
Esta entrada fue escrita por Mayra Herrera estudiante de tercer semestre de psicología. Universidad de la Costa. C.U.C. 2013.

PARTICIPACIÓN DEL SISTEMA NERVIOSO EN LA FUNCIÓN PSICOLÓGICA DEL LENGUAJE

Fuente: Mybankpics
El lóbulo temporal representa la corteza auditiva. Tiene un papel importante en funciones superiores y complejas relacionadas con la visión, la audición y la conducta afectiva, emotiva y social. Este lóbulo ha sido asociado con múltiples funciones neuropsicológicas, destacándose las relacionadas con la información auditiva y los pro­cesos de memoria, siendo la comprensión del lenguaje una de sus funciones más estudiadas. La parte posterior ha sido asociada con funciones perceptivo-motrices, perceptivo-espaciales, y con las representaciones visuales del lenguaje. Por último, las partes mediales del lóbulo han sido asociadas con el lenguaje verbo, la música, la discriminación de tonos, ritmos y sonidos en general, y la percepción del tiempo.
El lóbulo frontal constituye una de las áreas del cerebro que más ha evolucionado en el ser humano y que, a su vez, representa la base neuroanatómica más importante de la compleja conducta humana. 
Entre las funciones más importantes de este lóbulo encontramos: la capacidad para la síntesis o la integración de múltiples funciones, la atención selectiva, la memoria y la programación motriz, es decir, funciones motrices, sensoriales, perceptivas, cognitivas, mnésicas, etc. 
La parte posterior del lóbulo está relacionada con el aprendizaje motor, con la coordinación y automatización del lenguaje motor, con el control y ajuste del comportamiento psicomotor y con el control y ajuste de diferentes funciones visomotrices. 
La parte anterior está implicada en la mayoría de funciones complejas del ser humano, que van desde el campo afectivo y ético-moral hasta la esfera de la lógica, el razonamiento, y la creatividad, pasando por procesos cognitivos como atención, memoria, aprendizaje o lenguaje. Se relaciona con la musculatura voluntaria, implicada en los movimientos de cualquier conducta motriz y esquema corporal.
CONCEPTO DE LENGUAJE:
El lenguaje es el resultado de una actividad nerviosa compleja que permite la comunicación interpersonal de estados psíquicos a través de la materialización de signos multimodales que simbolizan estos estados, de acuerdo con una convención propia de una comunidad lingüística.
La palabra no es una mera asociación entre una imagen y un sonido la palabra es según Luria, una matriz multidimensional compleja, de diferentes datos y conexiones (acústicas, morfológicas, léxicas y semánticas). Por tanto, nombrar significa calificar según múltiples referencias. 
FUNCIONES DEL LENGUAJE
  • FUNCIÓN APELATIVA CONNATIVA O DE LLAMADA: Mediante esta función se actúa sobre el mundo para atraer o dirigir su atención. Esta función se halla en los animales y en las primeras etapas del desarrollo del lenguaje en el niño.
  • FUNCIÓN EXPRESIVA O EMOTIVA: Manifiesta un estado psíquico afectivo
  • FUNCIÓN REPRESENTATIVA: Se trasmite su contenido, Esta función requiere un sistema de signos, y es específicamente humana. Así el lenguaje humano se convierte en el segundo sistema de señales de Pavlov.
TIPOS DE LENGUAJE 
Verbal: Lo que decimos con palabras. 
No verbal: lo que decimos con los gestos de la cara y el cuerpo. Con el lenguaje no verbal podemos obtener una imagen más congruente de nosotros, ya que es espontaneo y difícil de controlar. 
En relación a los hemisferios, el izquierdo administra funciones analíticas y verbales, mientras que el derecho tiene funciones globales y no verbales, además en el se encierran contenidos inconscientes, sueños, movimientos involuntarios.
Existen algunas dimensiones de la conducta no verbal como son: 
  • Kinestesia: Gestos, movimientos del cuerpo, expresiones faciales. 
  • Paralingüístico: Características de voz, vocalización. 
  • Factores ambientales: Percepción del entorno propio, produce efectos como excitación, aburrimiento.
ASPECTOS REPRESENTATIVOS Y EXPRESIÓN DEL LENGUAJE 
El cerebro actúa en el lenguaje por medio de un sistema funcional complejo, con dos subsistemas:
  • Primario: oír-hablar
  • Secundario: leer -escribir 

ESTRUCTURAS CORTICALES Y SUBCORTICALES QUE INTERVIENEN EN EL LENGUAJE. 
La conducta compleja requiere redes neurales de gran magnitud. El lenguaje dependería de una red neural compuesta por otras redes locales separadas e interconectadas. Son básicas las áreas de Broca y de Wernicke, pero interaccionando con otras regiones cerebrales (Modelo Mesulam). 
La zona del habla corresponde a la superficie cortical irrigada por la arteria cerebral media en el hemisferio izquierdo. En la zona del habla se localiza el área de Broca, el área de Wernicke y el fascículo arqueado, que establece la comunicación entre ambas. 
Las lesiones de la zona del habla provocan afasias por desintegración, que se caracterizan por la imposibilidad de repetición. 
AREA DE BROCA 
Corresponde al pie de la tercera circunvalación frontal del hemisferio izquierdo, muy cerca del área de la cara del homúnculo motor (área 44), pero existen otras áreas relacionadas. En el modelo de Mesulam abarca: 
  • Area 44 (córtex premotor). 
  • Córtex premotor: área 6 
  • Córtex heteromodal frontal: 45, 47, 12 
Se encarga con la producción de movimientos relacionados con el habla. La lesión de esta zona produce afasia de broca: disminución marcada de la influencia verbal, trastornos de pronunciación (disartria), incapacidad de repetir, compresión reservada. 
Sustenta la función sintagmática: polo sintáctico articulatorio de la red neuronal para el lenguaje. Constituye un nódulo para la transformación de las representaciones neurales de las palabras (originadas en el área de Wernicke y en otras zonas cerebrales) en las correspondientes secuencias articulatorias. 
Secuencias fonemas, morfemas e inflexiones en las palabras. 
Secuencia las palabras en frases. 
Actúa sobre la sintaxis, ordena y organiza la pronunciación de las palabras seleccionadas del área de Wernicke. 
La lesión del área de Broca comporta trastornos en la producción más dificultades en la compresión de frases en la que el significado sea dependiente del orden de las palabras y del significado de las preposiciones. Suele acompañarse de hemiplejia derecha. 
AREA DE WERNICKE 
Corresponde a las regiones posteriores de la primera circunvalación temporal, y alcanzan zonas parietales adyacentes, especialmente el giro angular. 
Tercio posterior del giro temporal superior. Parte posterior del área 22. 
Al córtex de asociación auditiva de la zona superior del giro temporal superior (TAP) se le añaden las zonas adyacentes de las áreas heteromodales 37, 39 (giro angular PF, con papel en la lectura) 40 (giro supramarginal, área PG). 
Sustenta la función paradigmática: área de polo semántico-léxico de la red del lenguaje. Selecciona las palabras más adecuadas. 
Input: Convierte las secuencias auditivas en representaciones neuronales de las palabras. Luego se desencadenan las asociaciones que subyacen al significado. El léxico (diccionario) supone una matriz multidimensional distribuida que contiene información sobre la relación sonido-palabra-significado. El área de Wernicke es un ¨cuello de botella¨ para acceder al léxico. 
Output: vía final común para la trasformación de los pensamientos en las palabras que corresponden con el significado subyacente. La lesión altera la asociación de las palabras con los pensamientos y produce un habla vacía. 
La lesión de esta zona produce la afasia de Wernicke, caracterizada por pérdida masiva de la compresión (sordera verbal), incapacidad de repetir, habla fluida pero llena de parafasias, que la hacen incomprensible. Existen grandes dificultades para la lectura, proporcionales a la afectación del giro angular. 
Ambas áreas, Wernicke y broca, están implicadas en los aspectos expresivos-motores y receptivos-sensoriales del lenguaje oral y escrito (lectura y escritura). También forman parte de los sistemas neuronales para la praxis y la memoria verbal. 
Existen otras estructuras necesarias para el lenguaje, así como sus conexiones con el resto del sistema para el lenguaje: 
FASCICULO ARQUEADO 
Es un haz de fibras que conecta el área de Wernicke con el área de Broca, vehiculizando la expresión verbal del lenguaje. 
Conecta el córtex temporal, parietal y frontal bidireccionalmente. Parte de la red necesaria para ensamblar fonemas en morfemas, operación imprescindible para la vocalización o expresión interna de una palabra. 
Su lesión produce la afasia de conducción, caracterizada por incapacidad para repetir lo oído, con habla fluida y conservación de la comprensión. 
GIRO ANGULAR 
Corresponde al área 39 de Brodman. 
Constituye un relevo entre las zonas auditivas y visuales. 
Su lesión desconecta los sistemas implicados en el lenguaje auditivo y visual, alternado la lectura y otras funciones. 
AREA MOTORA SUPLEMENTARIA 
Corresponde a la zona premotora superior y medial, a la parte interhemeferica del área. (6) 
La lesión del área suplementaria izquierda provoca una afasia motora transortical, caracterizada por escasa fluencia y preservación de la repetición. Aparece acinesia y mutismo. Se altera la motivación para la comunicación. 
El área motora suplementaria presenta importantes conexiones con el estriado. Parece ser una zona de ¨ inicio de habla¨. 
OTRAS ZONAS CORTICALES 
Las áreas heteromodales de asociación temporoparietal son cruciales para los procesos de enlace de las palabras con su significado. 
El córtex prefontal heteromodal participa en la recuperación de palabras desde sus categorías supraordinales. 
El hemisferio derecho interviene en los aspectos prosódicos y paralingüísticos. 
HORMONAS QUE INTERVIENEN EN EL LENGUAJE: 
Cortisol: Se ha comprobado que el exceso de cortisol en el cerebro inhibe la actividad del lóbulo frontal, implicado en funciones del pensamiento, lenguaje y la razón, memoria, la creatividad, contemplación, planeación y pensamiento abstracto, de esta manera cuando tenemos pánico escénico, se produce una angustia emocional, que nos lleva a un estrés, el cual desencadena la producción de cortisol, o a veces llamada hormona del estrés. Que no nos permite hablar ya sea por no recordar la palabra o por el área de Broca que no nos permite gesticularla.
Testosterona: Se ha podido, descubrir que el exceso de testosterona en el desarrollo prenatal y del recién nacido (solo a los varones) afecta el desarrollo de estructuras implicadas en el lenguaje, ya que permite el desarrollo de sus áreas en el hemisferio derecho pero evita el desarrollo de las mismas en el hemisferio izquierdo, conllevando a los infantes a padecer distintos trastornos del lenguaje. Caso contrario a las niñas, que el exceso de testosterona es un desarrollador de su lenguaje, lo cual despertó la investigación que se está realizando ¿Cómo influyen los estrógenos en el desarrollo del lenguaje? si es que es por la presencia del índice total de testosterona o por el radio estrógeno/testosterona el retraso mental.
MODELO DE WERNICKE- GESCHIND 
Los siete componentes del modelo de Wernicke-Geschind son los siguientes: Corteza visual primaria, Giro angular, Corteza auditiva primaria, Área de Wernicke, Fascículo arqueado, Área de Broca, Corteza motora primaria.
PALABRA ESCUCHADA: 
Cuando se tiene una conversación las señales auditivas provocadas por el habla de la otra persona se reciben en la corteza auditiva primaria y se transmiten al área de Wernicke, donde se comprenden. Si resulta conveniente dar una respuesta, el área de Wernicke genera la representación nerviosa del pensamiento en que se basa la respuesta, que se transmite al área de Broca a través del fascículo arqueado izquierdo. En el área de Broca, esta señal activa el programa oportuno de articulación, que pone en marcha las neuronas adecuadas de la corteza motora primaria y finalmente los músculos articulatorios.
Modelo de Wernicke - Geschind 
PALABRA ESCUCHADA:

PALABRA LEÍDA: En segundo lugar, cuando se lee en voz alta la señal que recibe la corteza visual primaria se transmite al giro angular izquierdo, que traduce la forma visual de la palabra a su código auditivo y lo transmite al área de Wernicke para comprenderlo. El área de Wernicke provoca entonces las respuestas oportunas en el fascículo arqueado, en el área de Broca y en la corteza motora, respectivamente, para producir los sonidos de habla adecuados. 
PALABRA LEÍDA
BIBLIOGRAFIA:
  • Fajardo L., moya C., neuropsicólogos del lenguaje 1 ed., Salamanca: Ediciones universidad de Salamanca, 1999.
  • Martínez A. Sánchez M., Psicología (texto para bachilleres), México umbral editorial S.A. de C.V. 2006.
  • Ossewaarde, L., Qin, S., van Marle, HJF, van Wingen, GA, Fernández, G., y Hermans, EJ (2011). Reducción del estrés inducido en función de la corteza prefrontal relacionada con la recompensa. Neuroimage 55, 345 – 352
  • Whitehouse A., Mattes E., Maybery M., Sawyer M, Keelan J., Hickey M. Sex-specific associations between umbilical cord blood testosterone levels and language delay in early childhood, Journal of Child Psychology and Psychiatry, Volume 53, Issue 7, pages 726–734, July 2012
  • Pinel J. Biopsicología 4ta. Edición, Pearson educación, S.A., Madrid 2001, 525 p.
Imágenes: Mybankpics.

LA PERCEPCIÓN

Fuente: mybankpics
La percepción es el proceso cognoscitivo que permite interpretar y comprender el entorno. Por medio de ella se selecciona y se organizan los estímulos del ambiente para proporcionar experiencias significativas a quien los experimenta. La percepción incluye la búsqueda de la obtención y el procesamiento de información. Las personas reciben estímulos del ambiente a través de los cinco sentidos: tacto, olfato, gusto, vista y oído. 
La percepción no requiere recuerdos en el sentido ordinario, si no que es una actividad en la cual el pasado inmediato como el pasado remoto resulta actualizado, crea una experiencia del ambiente y nos permite actuar sobre ella. La percepción no es algo que simplemente pase, es el resultado de procesos complejos, muchos de los cuales escapan de nuestra consciencia. 
¿Cómo se interpreta la percepción? 
La interpretación de una persona de los estímulos sensoriales que recibe, conducirá una respuesta, sea manifiesta (acciones) o encubierta (motivación, actitudes y sentimientos) o ambas. 
Cada quien selecciona y organiza los estímulos sensoriales de manera diferente y, por lo tanto, llega a interpretaciones y respuestas diversas. 
Cerebro y la percepción 
¿Qué pasa en nuestro cerebro? ¿Cómo es el mecanismo que nos lleva a tener determinada percepción? ¿Cuál es la relación entre el contexto y la actividad cerebral para definir una u otra percepción? 
Un interesante artículo presentado en Science da pistas sobre la manera en que se articulan y coordinan diferentes zonas del cerebro para prestar atención a un fenómeno. 
Los neurocientíficos del McGovern Institute for Brain Research han descubierto que, en concreto, cuando nos fijamos en algo, las neuronas de la corteza prefrontal del cerebro se encienden al unísono y envían señales a la corteza visual para que ésta haga lo mismo. 
De esta manera, se generan en el cerebro ondas de alta frecuencia que oscilan entre estas dos regiones cerebrales, espacialmente separadas entre sí. 
Las ondas generadas, que son conocidas como oscilaciones gamma, ya habían sido asociadas con la percepción, la atención, el aprendizaje y la conciencia. Estas ondas se producen cuando los conjuntos de neuronas emiten señales eléctricas a una velocidad aproximada de unas 40 veces por segundo. 
Según explica el director de la investigación, Robert Desimone, que actualmente dirige el McGovern Institute for Brain Research, “estamos especialmente interesados en las oscilaciones gamma de la corteza prefrontal porque esta región provoca influencias de ida y vuelta sobre otras partes del cerebro”. 
“Sabemos que la corteza prefrontal se ve afectada en personas con esquizofrenia, con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y otros trastornos cerebrales, y que las ondas gamma también se alteran en estas condiciones. Nuestros resultados sugieren que una sincronía neuronal alterada en la corteza prefrontal del cerebro podría interrumpir la comunicación entre esta región y otras áreas cerebrales, produciendo percepciones, pensamientos y emociones alteradas”, señala el científico. 
Desimone explica lo que supone la sincronía neuronal utilizando la siguiente analogía: una fiesta abarrotada de gente, que se reparte por diversas habitaciones, hablando sin parar en todas ellas. 
Si la gente comienza a levantar la voz aleatoriamente, el ruido de la fiesta aumenta. Sin embargo, sin un grupo de personas en una habitación comienza a cantar al unísono, la gente de la habitación contigua tendrá más probabilidades de escucharlas. Si, además, responde cantando como ellos, las dos habitaciones pueden comunicarse. 
En el estudio aparecido en Science, Desimone buscó patrones de sincronía neuronal en dos “habitaciones” del cerebro relacionadas con la atención: el campo ocular frontal (que se encarga de los movimientos conjugados de los ojos, controla los movimientos oculares voluntarios, y es independiente de estímulos visuales), situado dentro de la corteza prefrontal; y la región V4 de la corteza visual. 
Esta región V4 se encarga del procesamiento del color, recibe información visual desde otras áreas visuales, y retransmite dicha información visual hacia áreas infotemporales y parietales. 
Dichos patrones de sincronía neuronal fueron buscados en dos monos macacos previamente entrenados para que mirasen múltiples objetos desplegados en una pantalla, y para que se concentrasen en uno de ellos al recibir una señal. 
Los científicos registraron la actividad neuronal del campo ocular frontal (corteza prefrontal) y de la región V4 (corteza visual) de los monos, tanto cuando éstos prestaban atención a determinados objetos como cuando los ignoraban. 
Así, descubrieron que cuando los monos atendían al objeto designado, las neuronas de ambas áreas mostraban un fuerte incremento en su actividad. Entonces, como si estuvieran conectadas, las oscilaciones establecidas en cada una de las áreas comenzaban a sincronizarse entre sí. 
Desimone y sus colaboradores analizaron el cronometraje de la actividad neuronal y descubrieron que la corteza prefrontal se activaba en primer lugar por la atención, seguida por la corteza visual, como si la primera ordenase a la región visual que atendiese. 
El desajuste temporal entre la actividad neuronal en estas áreas durante cada ciclo de ondas (de entre 8 y 13 milisegundos, según Science) reflejó la velocidad a la que las señales viajan de una región a otra, indicando asimismo que ambas regiones del cerebro se comunican la una con la otra. 
Desimone sospecha que este patrón de oscilación no es únicamente característico de la atención, sino que podría representar también un mecanismo más general de comunicación entre diversas partes del cerebro. 
Los hallazgos realizados en los cerebros de los monos respaldan las especulaciones que señalan que la sincronía gamma permite que extensas regiones del cerebro puedan comunicarse rápidamente unas con otras, lo que tiene importantes implicaciones para la comprensión y el tratamiento de trastornos como la esquizofrenia, la discapacidad visual o el déficit de atención. 
Según Desimone, estos resultados ayudarían a “pensar cómo se deben estudiar y tratar dichos trastornos encontrando maneras de restaurar los ritmos gamma en las regiones del cerebro afectadas”. 
Los científicos han estudiado durante más de 50 años las ondas gamma. Por ejemplo, en otro estudio reciente del MIT, el científico Li-Huei Tsai y sus colaboradores indujeron dichas ondas con luz láser aplicada, directamente, al cerebro de ratones, con el fin de analizarlas. 
Aplicando una novedosa tecnología conocida como optogenética, que combina la ingeniería genética con la luz para manipular la actividad de células nerviosas individuales, esta investigación ayudó a explicar cómo son producidas las ondas gamma por el cerebro, y el papel de éstas en las funciones cerebrales. 
Así, se reveló que las oscilaciones gamma reflejan la actividad sincrónica de una gran red de neuronas interconectadas, y que dichas oscilaciones estarían controladas por una clase específica de células inhibidoras conocidas como interneuronas de pico rápido, explicaron los científicos. 
Activando mediante la optogenética dichas interneuronas los científicos indujeron ondas gamma en el cerebro de los ratones, demostrando así por primera vez que es posible inducir un estado específico cerebral activando un tipo de célula específica. El experimento demostró asimismo que los ritmos de estas ondas regulan el procesamiento de las señales sensoriales, lo que respalda la idea de que la sincronía de las ondas gamma son clave en el control de la percepción de los estímulos. 

ATENCIÓN Y MEMORIA

La memoria y la atención se encuentran relacionadas indiscutiblemente pues parte del proceso de atención tiene su principio en recordar lo que los sentidos captan. Cuando uno presta atención a un sabor, el sentido químico del gusto intentará desmenuzar los sabores y recordar cada uno de los componentes hasta poder decir: sabe a… 
Cuando se pone atención a partir del sistema visual, uno debe recordar la ubicación espacial de los objetos, los colores, formas y estructuras compositivas de lo que se mira, a veces la velocidad y la naturalidad del movimiento (Delaney, Nghiem y Waldum, 2009). Y el proceso se vuelve complejo cuando después de mirar algo por un rato, se hacen preguntas específicas sobre ese objeto o esa composición. Por supuesto, entre más elementos se encuentren en lo que se observa, más complejo es determinar que se miró. 
Analice la imagen, vea los colores, y las formas, reconozca los objetos, revise la composición. 
¿Reconoce las aves?, ¿sabe sobre que están caminando?, ¿en dónde fue tomada la fotografía? 
La atención tendrá que basarse en el conocimiento previo de los elementos o de otro modo no será posible reconocer lo que se mira (Ruiz Contreras y Cansino, 2005). De ahí que el cerebro requiera de la complejidad de la interacción entre la memoria episódica también llamada de trabajo y la memoria a largo plazo que permita crear acceso a la información previa en el sistema. El principio se ha explicado como una revisión de los archivos contenidos en el cerebro, conservados para ser empleados a necesidad (St. Clair Thompson, 2010). 
Pero entonces, ¿cómo surge este sistema tan complejo y a veces hasta delicado llamado memoria en el proceso evolutivo?. 
La memoria, al igual que los demás procesos básicos (sensación y percepción, aprendizaje, motivación y emoción, pensamiento y lenguaje), está puesto al servicio de la pervivencia de la especie, es decir, sirve para mantenernos sobre la faz de la tierra. Pero además se adecua a las necesidades del individuo dependiendo de la interacción que tenga con el medio (Killgore y Yurgelun-Todd, 2009). 
En este sentido, se puede afirmar que el proceso de la memoria es flexible y en años recientes se ha encontrado que sus células son renovables, pues se ha hecho mucha investigación que muestra que tanto las células del hipocampo que es donde se cree está asentada físicamente el proceso de la memoria, como las del bulbo olfatorio, cambian constantemente, al igual que los células óseas y las dérmicas (Alvaréz – Buylla y García Verdugo, 2002). 
Es por ello, en parte que la memoria requiere consolidación. Intente recordar estos dígitos: 9, 3, 9. 0, 9, 2, 1, 7… 
Usualmente se asocia al aprendizaje con la memoria, de hecho el proceso completo es aprendizaje y memoria, ambos requieren de la atención, pero entonces ¿se recuerda y luego se aprende o se aprende y luego se recuerda?. ¿Qué fue primero? ¿el huevo o la gallina?. Desde el punto de vista cerebral, uno se apoya en el otro, puedo decir mi nombre porque he aprendido que asi me conoce la gente y si entre una múltitud alguien grita mi nombre, aún con poco esfuerzo, buscaré a quien creo que me llama. Pero entonces ¿los bebés tienen conocimientos previos que luego recuerdan? 
Antes que nada, la memoria se encuentra en otras especies, se han realizado múltiples estudios de memoria en gatos, todos sabemos que los perros recuerdan caminos, personas y olores, que algunas especies de aves pueden recordar palabras y que entre más grande y evolucionado el cerebro de una especie, le es posible crear interacciones más complejas entre procesos. 
También se sabe que la memoria está localizada en el hipocampo, el cual es parte de lo que se llama sistema límbico, ubicado exactamente a la mitad del cerebro y que también alberga a las emociones. De ahí que exista una fuerte relación entre la memoria y la emoción. 
Esa relación crea recuerdos incompletos, por ejemplo cuando adultos recordamos el momento en que uno de los padres empleó algún tipo de castigo para reprender una conducta indebida. Es sencillo recordar el castigo y el dolor causado, ya sea físico o emocional, pero cuando se pregunta: ¿Por qué te castigaron?, usualmente el recuerdo es mucho más vago. La conducta indebida no inflingió el dolor, el castigo fue el evento doloroso. 
¿Puede recordar los números que se anotaron un poco más arriba en este artículo?, ¿recuerda el orden exacto?, ahora… ¿podría recordarlos en orden inverso?... 
Cuando se llevan estudios de laboratorio, usualmente se emplean estímulos como recordar dígitos, palabras en orden, relacionadas… como se hace en las pruebas psicométricas, pero en la realidad, la cantidad de estímulos es tal, que difícilmente se pueden recordar y poner atención a tantos eventos. Antes se decia que el número mágico de la memoria era 7±2… pero si logramos recordar 3 cosas, a veces es suficiente. 
Y en esta era de la información donde todo fluye a velocidades de pentium 5… ¿cómo recordar la fecha del día, la cita de las 5, la lista del super, la tarea de mañana, el cumpleaños de alguien, el número de teléfono y además, poner la alarma de despertador?. 
Aprendemos a depender de aparatos que nos hacen fácil la vida, como las agendas electrónicas, los teléfonos inteligentes, la Ipad, la laptop… los papeles autoadheribles… pues el cerebro no es expandible, está confinado en un espacio finito, por ello depende de la economía cognitiva, y recuerda solo lo importante ¿dónde dejé mi célular?. 
Pero cuando bebés, las cosas son distintas. No se recuerda, se actúa a partir de los llamados instintos primarios, comer, dormir, defecar… eso no se tiene que recordar, tampoco respirar o sudar. La naturaleza dotó a las especies de medios de sobrevivencia. Si bien el cerebro está apto para funcionar en esas condiciones, no está completamente desarrollado. De hecho, quiero pensar que nunca termina de desarrollarse, pues las distintas áreas comienzan la carrera por cablear, que no es otra cosa que crear redes neuronales, funcionales, es decir, que den respuesta a las necesidades del ambiente (Dzib Goodin, 2011). 
La carrera por conectar, bajo la lucha del más fuerte y de que solo lo que se usa se queda y lo que no se desecha, comienza desde antes de nacer, pero será más evidente durante el primer año de vida. Comienza el desarrollo de lo que se conoce como sustancia blanca, que no es otra cosa que el medio conductor de impulsos eléctricos. A esta sustancia se le ha asociado con la velocidad de procesamiento y de conectividad entendida como la capacidad de conectar diferentes regiones del cerebro de forma eficaz (Roberts, Anderson y Husain, 2010; Tirapu-Ustárroz, Luna-Lario, Hernáez-Goñi, y García-Suescun, 2011). 
Conforme crecemos, con la interacción del ambiente, se van creando redes o circuitos específicos, de ahí que aun cuando dos personas vivan los mismos eventos, cada uno recordará o analizará el mismo de manera distinta. Algunos desarrollarán más el sistema visual y les será sencillo recordar estímulos visuales mientras que otros se inclinarán más por lo sonoro. 
La relación entre el aprendizaje y la memoria, surge entonces como una necesidad de consolidar aquellas cosas que se vuelven importantes, por ejemplo el camino a casa, el nombre de la calle donde se vive, el nombre propio, como andar en bicicleta o bien conducir un auto, recordar el alfabeto y los sonidos asociados a cada signo, lo mismo sucede con los números, la relación entre las operaciones aritméticas… lo que se aprende se mantiene en el sistema cognitivo, si además hace falta y se usa constantemente, se consolida, si se le suma aquello que nos gusta y nos hace sentir bien, muy probablemente se repetirá muchas veces, tantas, que creará una red neuronal fuerte y será difícil modificarla. 
Los hábitos, no son más que redes neuronales consolidadas, no hay que pensar como se usa el cepillo de dientes, en cuanto nos acercamos a donde está, lo tomamos sin pensar con que mano debe hacerse, lo usamos como mejor podemos, nos enjuagamos y lo ponemos en su lugar sin pensar demasiado en ello. 
Usted como lector experto ha podido reconocer cada signo de este escrito, recordó los sonidos asociados, los juntó, los comprendió y le dio un significado al texto. Nadie ha tenido que decirle, esta es una A y esta una B y suena así… ahí se explica la relación entre aprendizaje y memoria. 
¿Puede mencionar los números que se leyeron antes en este escrito?, ¡no se preocupe!, el 98% de las personas no logra hacerlo y en este caso es un buen síntoma pues prestó más atención al texto. ¿de que sirve recordar esos números? A menos que haya una recompensa de 3 mil dólares no vale la pena emplear una parte de su procesamiento cognitivo para ello. 
Se consolida en la memoria, aquello que sirve, que nos causa una emoción muy fuerte, o aquello que nos permite sobrevivir. ¿A quién le importan unos cuántos números?, solo aquellos que tienen una lesión cerebral que les crea una obsesión… a veces es bueno depender de los medios electrónicos para recordar, o de los procesos fisiológicos, para recordar que ya es hora de comer. 
Referencias 
Alvaréz – Buylla, A. y García Verdugo JM. (2002) Neurogenesis in adult subventricular zone. The Journal of Neuroscience. 22(3) 629-634. 
Delaney, PF., Nghiem, KN and Waldum, ER. (2009) The selective directed forgetting effect: Can we forget only a part of a text?. The Quaterly Journal of Experimental Psychology. 62 (8) 1542-1550. 
Killgore, WDS. and Yurgelun-Todd, DA. (2009) Cerebral correlates of amygadla responses during non-conscious perception of facial affect in adolescent and pre adolescent children. Cognitive Neuroscience. I (1) 1-11. 
Roberts, R.E., Anderson, E. J., Husain, M. (2010) Expert Cognitive Control and Individual Differences Associated with Frontal and Parietal White Matter Microstructure. The Journal of Neuroscience. 30(50): 17063-17067. 
Ruiz Contreras, A. y Cansino, S. (2005) Neurofisiología de la interacción entre la atención y la memoria episódica: revisión de estudios en modalidad visual. Rev. Neurol. 41 (12) 733-743. 
St. Clair Thompson, HL. (2010) Backwards digital recall: A measure of short-term memory or working memory?. European Journal of Cognitive Psychology. 22 (2) 286- 296. 
Tirapu-Ustárroz, J., Luna-Lario, P., Hernáez-Goñi, P., García-Suescun, I. (2011) Relación entre la sustancia blanca y las funciones cognitivas. Rev Neurol. 52 (12): 725-742.

PARTICIPACIÓN DEL SISTEMA NERVIOSO EN LA FUNCIÓN DE LA MOTIVACIÓN

Fuente: Mybankpics
La motivación es entendida como la necesidad o el deseo que activa y dirige nuestro comportamiento,[1] es en sí una función psicológica compleja, que a través de conexiones nerviosas, nos permite realizar distintas acciones, que nos causan satisfacción. Ya sea desde una simple necesidad básica como el comer o dormir o una motivación secundaria del tipo obtener un título, afiliarse a una persona, etc. 
El conocimiento de los mecanismos biológicos implicados en la motivación se encuentra relacionado con todo lo referente a los sistemas de refuerzo, entendiendo que los individuos siempre experimentan motivación cuando esperan alcanzar, o luchar para conseguir, algún objetivo que incremente su probabilidad de supervivencia, su capacidad de adaptación y su calidad de vida. 
El hipotálamo y el sistema límbico juegan funciones esenciales, ya sea como incitadores y/o movilizadores. 
Desde el punto de vista fisiológico, las siguientes estructuras participan en la función psicológica de la motivación: 
  • Tálamo y corteza cerebral: produce una sensación placentera y es positivamente reforzante. 
  • Hipocampo, hipotálamo: también es positivamente reforzante, pero al mismo tiempo resulta inhibidor de ciertas conductas. 
  • Circuito amigdalino (amígdala – hipotálamo): está asociado a reacciones de miedo, rabia y agresión, además de establecer las principales características de la reacción defensiva.[2]
Bibliografía: 
  • McGraw-Hill, Introducción a la psicología, México, edit. Grijalbo 1981 
  • Elvira Valdés, María. Motivación y Neurociencia: Algunas Implicaciones Educativas, Acción Pedagógica, Nº 20 / enero - Diciembre, 2011 - pp. 104 - 109 
  • [1] McGraw-Hill, Introducción a la psicología, México, edit. Grijalbo, 1981. Pág. 318 
  • [2] Elvira Valdés, María. Motivación y Neurociencia: Algunas Implicaciones Educativas, Acción Pedagógica, Nº 20 / enero - Diciembre, 2011 – pág. 106

ENVEJECIMIENTO CEREBRAL


Un cerebro humano sano (izquierda) comparado con un cerebro de 90 año de edad (derecha) este es dos tercios menos del tamaño del cerebro joven. Con el tiempo, la materia blanca disminuye y el cerebro se contrae. Esta contracción gradual es más extrema entre los 70 y 80 años. fuente: everything is science, imagen: myimagebank.
En la especie humana el cerebro varía y tiene un ciclo natural donde a través del tiempo presenta cambios morfológicos, fisiológicos, y metabólicos normales en el ciclo vital de los seres humanos; no se deriva de enfermedades pero si acerca al individuo a la muerte. Este proceso progresivo y universal podría definirse como la perdida de adaptación a cualquier cambio, aguda necesaria para una vida relación normal, afectando diferente partes del cerebro. 
Para la OMS el proceso de envejecimiento es normal y no uniforme; comienza al momento de nacer y por ende pasa por todos los seres vivos; se acentúa en los últimos años de vida y se produce una limitación de la adaptación; diferente en cada especie y en cada humano; el envejecimiento de los órganos no surge al mismo tiempo en todos los individuos. 
El envejecimiento cerebral produce cambios como: 
  • Disminución del peso cerebral. 
  • Disminución del volumen cerebral. 
  • Atrofia cortical. 
  • Pérdida de neuronas corticales y de algunos núcleos subcorticales. 
  • Aumento de gránulos de lipofuscina en neuronas y glía. 
  • Cambios hipertróficos en la glía astrocitaria . 
  • Se afectan las estructuras filogenéticas y ortogenéticamente más antiguas. 
  • Pueden reducir los riesgos de desarrollar demencia en la reserva intelectual y factores dietéticos hormonales y genéticos. 
Tomado de: Dr. Alfonso Escobar Izquierdo Envejecimiento cerebral normal Revista Mexicana de Neurociencia 2001; 2(4): 197-202. Articulo de revision